Centro de Control y Respuesta a Emergencias monitorea puertos del Callao, Paita e Iquitos

·         Garantiza el desplazamiento de camiones y embarcaciones, y lo hace a través de cámaras de videovigilancia instaladas en los terminales.

 

  Para el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) es una prioridad agilizar y garantizar la cadena logística portuaria. Por ello, el Centro de Control, Comunicaciones y Respuesta a Emergencias de la Autoridad Portuaria Nacional, entidad adscrita al MTC, brinda apoyo a las embarcaciones y a los camiones que ingresan y salen de los puertos e instalaciones portuarias del Callao (Lima), Paita (Piura) e Iquitos (Loreto).

Este centro, a través de cámaras de videovigilancia, monitorea la normal prestación de los servicios portuarios, centralizando, procesando y analizando cualquier información que pueda afectar al Sistema Portuario Nacional, en el marco del Código Internacional para la Protección de los Buques y de Instalaciones Portuarias (PBIP).

Las cámaras, ubicadas en las vías de acceso terrestre de los mencionados terminales portuarios, permiten que el Centro de Control y Respuesta a Emergencias efectúe un monitoreo diario del flujo de vehículos que entran y salen de dichas instalaciones.

Desde el Callao, se monitorea la prestación de los servicios portuarios a nivel terrestre y marítimo, centralizando, procesando y analizando cualquier información que pueda afectar al Sistema Portuario Nacional.

Para realizar un trabajo articulado, este centro se encuentra instalado en el Comité de Inteligencia Portuaria, conformado por la Dirección Nacional Antidrogas (Dirandro), la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri), la Dirección Contra el Terrorismo (Dircote) y la Dirección de Policía Fiscal (Dirpolfis), así como el Programa Global de Control de Contenedores, quienes se encargan del perfilamiento de contenedores de exportación para identificar casos de narcotráfico y contrabando.

La cadena logística comprende todos los procesos y medios que hacen que un producto se desplace desde la fábrica, que lo ha producido, hasta el consumidor o cliente final.